En su visita a Zárate, el candidato presidencial Roberto Lavagna estuvo acompañado por uno de los dos precandidatos a la gobernación bonaerense que lo siguen, el empresario Francisco De Narvaez. El otro precandidato es el ex ministro de Economía de Duhalde Jorge Sarghini.
En el plano de las definiciones, Lavagna no se presentó como "el gran opositor", sino como alguien que participó en la gestación del actual modelo, pero que ve que actualmente "con eso no alcanza", sino que aprovechando el crecimiento sostenido de la economía hay que empezar a atacar los problemas estructurales del país, como la pobreza, la inseguridad y la falta de capacitación laboral.
Caracterizó al estilo K como la "política patovica" de pelearse con todos, promoviendo en cambio un estilo consensual de conducción política.
"Actualmente hay 12 millones de argentinos que viven por debajo del nivel de pobreza",caracterizó el candidato, "con el actual presupuesto destinado a Desarrollo Social se le podría dar a cada uno de ellos un ingreso que los saque de ese nivel, eso significa que los recursos para terminar con la pobreza están, lo que falta es una buena gestión de esos recursos."
Luego de efectuar una semejanza con la medicina, con el consabido juego de los diagnósticos y los tratamientos, el Chauncey Gardiner argentino acotó "Les aconsejo algo: cuando habla un político, no le crean".
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